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ENSENADA, B.C., a martes 18 de octubre de 2016.- Con el objetivo de llevar a cabo el desarrollo del cultivo comercial de algas marinas para consumo humano, la Universidad Autónoma de Baja California (UABC) a través del Instituto de Investigaciones Oceanológicas (IIO), firmó un convenio de colaboración con Productos Marinos de las Californias (PROMAC).
La Vicerrectora del Campus Ensenada, doctora Blanca Rosa García Rivera, encabezó la firma del convenio acompañada del Director del IIO, doctor Asdrúbal Martínez Díaz de León y el doctor José Antonio Zertuche González, investigador responsable del proyecto.
“Para la UABC una función sustantiva es el tema de la vinculación con los sectores sociales y productivos, esta acción que hoy realizamos es con el objetivo de buscar el desarrollo de nuestra región y del país mediante la investigación pertinente”, destacó la Vicerrectora.
Este proyecto inició en 2015 entre la UABC y la empresa PROMAC, representada por el ingeniero Emmanuel Guevara Luders, el cual ha tenido resultados favorables en cuanto a considerar el cultivo comercial del alga marina Ulva spp conocida como “lechuga de mar”, durante un año de manera continua, debido a que estas especies son temporales y tienden a desaparecer en el verano.
Es importante señalar que la tecnología implementada permitió cultivar el alga todo el año, en pozas en tierra, en tasas altas de hasta 200 gramos por metro cuadrado, equivalente a producir 73 toneladas por hectárea.
El doctor José Antonio Zertuche González, investigador del IIO, comentó que con la firma de este convenio se inicia la valoración de una etapa piloto comercial donde se aplicarán mejoras tecnológicas a las pozas de cultivo con el propósito de reducir costos. Estas mejoras se validarán para aplicar en lo que será la primera granja comercial de algas marinas en México que pretende entrar en operación a mediados del año próximo.
“Baja California es reconocido mundialmente por las algas marinas que tiene, sin embargo, hay dos problemas principales por los cuales no aprovechamos este recursos; primero, no tenemos la cultura en México del consumo de las algas, y segundo, es que no hay población de algas todo el año y están sujetas a cambiar su composición nutricional muy fácilmente de acuerdo a las condiciones ambientales”, enfatizó el doctor Zertuche González.
Refirió que el proyecto incluye el entrenamiento de personal para trabajar en la granja comercial y permitirá la participación de estudiantes del programa de Biotecnología en Acuacultura y Oceanología de la UABC, quienes colaborarán para controlar los cultivos y tener productos estables en composición nutricional.
“Con esto se abre un panorama para considerar las algas como ingrediente a poner en cualquiera de los alimentos que consumimos, como salsas, pastas, aderezos, mermeladas, de los cuales se obtendrá un alto valor nutricional, sin la necesidad de tener que adaptarse a platillos de otros culturas”, mencionó el investigador titular del IIO.
Por su parte, el ingeniero Emmanuel Guevara Luders, Director General de PROMAC, afirmó que el objetivo de la empresa es la comercialización de productos marinos de bajo impacto ambiental, “la idea de esta vinculación es muy importante para tener oportunidad para desarrollar nuevas alternativas económicas de acuacultura ecológica”.
Asimismo, expresó que dos de los aspectos más importantes de este proyecto es el cultivo continuo para tener disponibilidad de las algas marinas, y a su vez, evaluar el mercado con un ingrediente nuevo.
“Estamos en la etapa de evaluación, investigación y desarrollo del producto, a partir de que nosotros tengamos una instalación en Eréndira y construyamos una granja con todos los desarrollos de tecnología que tiene la UABC, a partir de ahí vamos a evaluar el producto y hacer unas muestras de comercialización y evaluar el mercado en Estados Unidos y México”, refirió el joven empresario.
Cabe mencionar que actualmente la UABC cuenta con una unidad de cultivo piloto para macroalgas, única en América con más de 500 metros cuadrados de área de cultivo, que cuenta con un complejo sistema de filtrado y aireación que permite determinar las mejores condiciones de cultivo así como los costos.
