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* Hospital General negó atención a migrantes y administradores de albergues
Por: Luis Arellano Sarmiento
MEXICALI. – 02 de junio de 2020.- A pesar de ser personas que por la naturaleza de su actividad tienen contacto con grupos de migrantes, en el Hospital General de Mexicali se le negó la atención a dos administradores de albergues.
Se trata de Altagracia Tamayo Madueño, quien hace una semana presentó síntomas y acudió al hospital exclusivo para atender casos de coronavirus, pero no accedieron a atenderla.
La mujer es de edad avanzada, es hipertensa y desde hace años también sufre de diabetes, y ante la negativa del personal del Hospital General, recurrió a un infectólogo particular, quien finalmente diagnosticó COVID-19.
El examen le costó 4 mil 600 pesos, más lo que está pagando en medicinas, indicó la administradora del albergue Posada del Migrante, quien habla con dificultad debido a la enfermedad.
Los internos del albergue no están contagiados, aseguró la activista pro migrantes.
En el albergue Alfa y Omega, 14 migrantes centroamericanos y el administrador, Tomás Vargas Diosdado, también se contagiaron de coronavirus, nueve de ellos ya superaron la enfermedad.
El pastor cristiano, relató que en el lugar habitan 72 migrantes, la gran mayoría de centroamericana, y aunque el albergue fue cerrado a recibir nuevos migrantes debido a la pandemia, los que ya estaban ahí y tenían que salir a trabajar contrajeron el virus.
El pastor de profesión, denunció que han tenido que sufragar los gastos de medicina y tratamiento, pues acudieron al Hospital General pero no los quisieron recibir.
“Desde hace año y medio, los albergues estamos solos”, aseveró el protector de migrantes.
Al ser uno de los contagiados, este martes 2 de junio el propio Vargas Diosdado cumple el total de días para poder ser dado de alta de la enfermedad, pero aún hay otros 6 migrantes que apenas llevan 8 días con el mal, explicó el activista.
Un laboratorio particular confirmó el contagio de COVID-19, porque “fuimos al Hospital General, no nos la quisieran hacer, fuimos a la Cruz Roja, no nos quisieron atender, y pues ya estábamos empeorando todos, por eso fue que decidí buscar un doctor particular, un especialista, y pues gracias a dios a todos nos sacó adelante”.
La prueba de COVID le costó 3 mil pesos, que al dar positivo, al resto de personas que tenían los mismos síntomas, también recibieron tratamiento para esa enfermedad.
Uno de los 15 contagiados, es un anciano de 74 años que presentó síntomas, al que hubieran querido hospitalizar, pero tampoco lo recibieron, narró el responsable del albergue.
Por fortuna, continuó, pudieron recurrir a atención médica privada, por lo que el estado de salud del señor está mucho mejor, expuso el administrador de Alfa y Omega, quien dijo que a él la enfermedad le hizo perder 22 kilos.
Por su parte, el administrador del Hotel del Migrante, Sergio Tamai Quintero, informó que tiene más de cien personas en el albergue, la mayoría centroamericanos.
En ese lugar no ha habido brotes, aunque recriminó la falta de un protocolo de salubridad para detectar a posibles migrantes deportados por la garita de Calexico a Mexicali.
